El Rechazo

Esa tarde de sábado, mientras me la follaba (sí, una enfermera de la Católica que trabaja en la Elqui) me decía hacia mí mismo "Acuérdate de esto, weón, que apenas termines no la volverás a ver" y exacto, ocurrió. Con las tipas con las que he follado, sólo con tres me he vuelto a reencontrar en la cama. Las encontronas incómodas en el supermercado o en algunos bares no cuentan.
Y es que esta visión fatalista de la vida, de agarrarlo todo y no disfrutarlo ahora, sino después, y si de no poder repactar la felicidad, al menos tratar de recordar todo en la cesera, wowcorazón, cansa. Sí, al menos a esta enfermera de la Católica me la follé, pero no disfruté. Quizás por eso las minas a las que follo no vuelven a mí: Semental a medias. Aquí falta grito y pasión, y no ser una videograbadora, estática y objetiva.